Brighton 64 (2.1.D)
Barcelona (1981–1987) Ricky Gil bajo y voz; Albert Gil guitarra; Tino Peralbo batería; Jordi Fontich teclados. [Formación clásica]
Pioneros y paladines del modernismo español, se formaron tras un viaje de Ricky Gil a las islas británicas que le unió para siempre a la iconografía mod. Y es que lo de B–64 era una auténtica apología del mod británico, desde su nombre al sinfín de muestras de apasionada militancia juvenil (llegaron a dar sus primeros conciertos con una Union Jack presidiendo el escenario.
En 1982 graban un directo junto a otras bandas para el programa de TVE ‘Musical Express’ emitido el 18 de julio de aquel año y que hoy son todo un documento testimonial de los primeros tiempos del mod catalán. Meses después, en 1983, graban su primer disco para el sello Flor y Nata. Los temas (“Barcelona Blues”, “JP”, “La Calle Dónde Yo Caí” y “Te Da Igual”) estaban deficientemente grabados y ejecutados; los solos del guitarrista (que había grabado con Loquillo y Los Intocables) eran el único y dudoso alarde instrumental del disco y demostraban lo precipitado de aquel debut. Pese a todo, la fiel concurrencia militante les apoya y el disco se vende como rosquillas por toda España, lo que anima a FyN a mantener al grupo en catálogo. Los inevitables cambios de formación comienzan a sucederse, y Ricky y Albert montan un grupo paralelo, Los Novios, con teclista y una cantante, María, para dar un respiro a B—64. Pocos meses después, con ayuda de Andrés, el batería de Killwatts (y más tarde de KAMENBERT) los Gil graban un potente single, “Deja De Tocar A Mi Chica”/”No Volverán”, que demuestra que han aprendido bien la lección: correcta instrumentación en la línea de los CHORDS, buenas letras y las voces mucho mejor moduladas que en su anterior entrega. A finales de año tocan ante cientos de mods europeos en una concentración internacional en Roma, pero el grupo no acaba de establecerse como banda.
Tras varios devaneos con los Novios y el fantasma de la disolución rondándoles, B–64 reaparecen sorprendiendo gratamente al público. Habían incorporado a Tino Peralbo como batería estable, se les notaba las lecturas de Tom Wolfe y mostraban aún más pulida su exacerbada pasión mod. Su imagen rebasaba con creces los tópicos (absolutamente todas sus portadas fueron siempre de primera categoría) y, por fin, empezaba a notarse su amor por el pop–art y el SOUL de Tamla Motown y Stax. Aquel año publican su excelente primer álbum, “Haz el amor”, editado por Twins, que debido a una penosa distribución no alcanza los objetivos previstos. Pero lo mejor aún estaba por llegar; consolidada su formación como cuarteto, en 1986 publican con EMI el maxi “La Casa De La Bomba”, detonante de su segundo álbum “El Problema Es La Edad”. Temas como los que dan título a ambos vinilos y otros como “El Mejor Cocktail”, “La Ley Del Mínimo Esfuerzo” o “La Calle 46 (Club Negro)” -virtualmente copiada por los FLECHAZOS en "La Reina Del Muelle"-, son buenas muestras de la madurez del grupo. Tampoco su directo tiene ya nada que envidiar al de las mejores bandas de rock estatales.
En 1982 graban un directo junto a otras bandas para el programa de TVE ‘Musical Express’ emitido el 18 de julio de aquel año y que hoy son todo un documento testimonial de los primeros tiempos del mod catalán. Meses después, en 1983, graban su primer disco para el sello Flor y Nata. Los temas (“Barcelona Blues”, “JP”, “La Calle Dónde Yo Caí” y “Te Da Igual”) estaban deficientemente grabados y ejecutados; los solos del guitarrista (que había grabado con Loquillo y Los Intocables) eran el único y dudoso alarde instrumental del disco y demostraban lo precipitado de aquel debut. Pese a todo, la fiel concurrencia militante les apoya y el disco se vende como rosquillas por toda España, lo que anima a FyN a mantener al grupo en catálogo. Los inevitables cambios de formación comienzan a sucederse, y Ricky y Albert montan un grupo paralelo, Los Novios, con teclista y una cantante, María, para dar un respiro a B—64. Pocos meses después, con ayuda de Andrés, el batería de Killwatts (y más tarde de KAMENBERT) los Gil graban un potente single, “Deja De Tocar A Mi Chica”/”No Volverán”, que demuestra que han aprendido bien la lección: correcta instrumentación en la línea de los CHORDS, buenas letras y las voces mucho mejor moduladas que en su anterior entrega. A finales de año tocan ante cientos de mods europeos en una concentración internacional en Roma, pero el grupo no acaba de establecerse como banda.
Tras varios devaneos con los Novios y el fantasma de la disolución rondándoles, B–64 reaparecen sorprendiendo gratamente al público. Habían incorporado a Tino Peralbo como batería estable, se les notaba las lecturas de Tom Wolfe y mostraban aún más pulida su exacerbada pasión mod. Su imagen rebasaba con creces los tópicos (absolutamente todas sus portadas fueron siempre de primera categoría) y, por fin, empezaba a notarse su amor por el pop–art y el SOUL de Tamla Motown y Stax. Aquel año publican su excelente primer álbum, “Haz el amor”, editado por Twins, que debido a una penosa distribución no alcanza los objetivos previstos. Pero lo mejor aún estaba por llegar; consolidada su formación como cuarteto, en 1986 publican con EMI el maxi “La Casa De La Bomba”, detonante de su segundo álbum “El Problema Es La Edad”. Temas como los que dan título a ambos vinilos y otros como “El Mejor Cocktail”, “La Ley Del Mínimo Esfuerzo” o “La Calle 46 (Club Negro)” -virtualmente copiada por los FLECHAZOS en "La Reina Del Muelle"-, son buenas muestras de la madurez del grupo. Tampoco su directo tiene ya nada que envidiar al de las mejores bandas de rock estatales.
-La Casa De La Bomba-
En 1987 la banda lo tenía todo a sus pies excepto a su disquera. EMI esperaba más ventas de aquellos vinilos, y la nula promoción no retrasó precisamente la crisis que se avecinaba. Sin sello y rebasada con creces la veintena, Albert y Ricky se percataron de que existía vida más allá del movimiento mod, del que se fueron desvinculado paulatinamente. A renglón seguido, los hermanos montaron otro combo, los Brigatones, que a su vez daría paso a otra nueva banda, Matamala, con una línea de pop-rock clasicón en catalán, curiosamente bastante cercana a los parámetros de B–64. Ya no volvieron a tocar en concentraciones mod, pero, a su manera, siguieron apoyando la escena estatal con la edición de discos recopilatorios de bandas olvidadas y nuevos trabajos de jóvenes promesas desde sus propio sellos, Al·leluia Records y, más tarde, Bip–Bip, ya entrada la década de los 90. Pero esa ya es a otra historia.
- [Fusilado de Popes 80]
- En la actualidad, Ricky Gil está en los Top Models, que acaban de sacar nuevo disco (2006), y recientemente ha publicado el fantástico libro Bola y Cadena. 20 años de explosión mod (Milenio, 2003), infinitamente mejor escrito que el plúmbeo Corre Rocker de Sabino Méndez.
- Albert acaba de estrenar disco y banda con Chest.
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